Mi hermanita, el gato que echamos a la olla, y mi mamá.
Ahí disculpen que ande yo tan indiscreta, haciendo pública a mi familia. Pero es para que la conozca mi pastelito porque, aunque mi pastelito y yo nos queremos, por el momento no nos hablamos. Jeje. Nada me hace más feliz que pasar mi cumpleaños con ellas (como estar en el centro de la absoluta aceptación) y el fotógrafo (que es mi hermanito). ¡Conócelas, guapo!