Relámpago, Harry, Macedonia, Diva, Scrapy, Chino, Frida, Reina, Cachetes, Princes y tres más que faltan de nombrar porque son recién nacidos (hijos de Harry y Macedonia) han sido los perros con los que he convivido estos días. Aaaah, la paz es más amplia cuando los perros nos acompañan, sin duda ¿olvido a alguno? Naaah. El perro más feo, pero el más cariñoso es El Chino. La nueva dueña de mi corazón es Reina y la que tiene TODOS los derechos sanguíneos y de antigüedad es Diva, por supuesto -como si la hubiera parido-. Love yall. ¿podré llevarme un perro más a mi casa? ¡¡¡quiero!!! vivo en una ciudad tan poco perruna y tan poco humana. Vivo en una ciudad que es tan falsa como un set cinematográfico y tan sucia como las bodegas de los barcos antiguos donde transportaban esclavos que eran tratados como la basura. Vivo en una ciudad donde todos somos explotados si queremos ser cool (osea, pagar 5 dlls por un café u 8 dlls por un vaso de agua de coco -eso sí, bien saludable-). Vivo en una ciudad donde los hipsters dicen que no existe el racismo, sino el "enfrentamiento entre las etnias". Bueno, ahí viven también unos cuantos amigos, escritores, muy queridos -la inteligencia de mis amigos escritores me paraliza y me enmudece, by the way (rodeados de muchísimos artistas -por algo será). Muchos artistas se alimentan del caos que, en las grandes ciudades, brota interminable. A mí suele bastarme mi caos interior (jeje), tal vez por eso creo que es un error pensar que el arte debe estar sólo en las grandes ciudades. El arte debería estar en el lugar más recóndito, tener valor de joya, en lugar de estar entre las multitudes luchando por hacerse notar o ser reconocido. Odio las competencias. Ya lo he dicho antes. No entiendo por qué los artistas creen que Nueva York es mejor foro que San Helisario, por ejemplo. ¿Porque en NY habrá gente "importante" para aplaudir los grandes y creativos aciertos de los artistas? ¿Vale más el aplauso de un niuyorquino, que el de un texano? Tal vez todo se mezcle con esta idea de "hacer una carrera artística" ¿no creen? O esa creencia básica para algunos artistas de que con su "obra" acertaron en algo (es tan ridículamente fácil creer que uno tiene razón, y que su trabajo a dado en el blanco -¿en el blanco de qué?jeje- En fin. En ciudades tan monstruosas como Los Ángeles, por ejemplo, uno puede salir a caminar y regresar a casa con una canasta llena de limones o naranjas porque se caen de los árboles. En el centro del monstruo los árboles continúan como siempre, regalando sus frutos. Mientras tanta gente muere infectada, adicta o demente, ordenadamente tendida en los rincones más oscuros de las calles. ¿Será entonces el dinero para el arte que congrega a los artistas en las grandes ciudades? ¿O el público? ¿O el aburrimiento los orilla a necesitar la miseria cerca de sí mismos -pero fuera de sí mismos? En países como México, por lo menos, sabemos que es el presupuesto gubernamental el que mueve todos los hilos y los gustos, los premios y los nombramientos, es decir: la figura del artista se construye de las manos de otros artistas que alguien más construyó. En este país creo que el dinero es tan importante como el ego gigantesco porque los "artistas" no sólo tienen una excelente posición superior, en una ciudad superior, dentro de un país superior, sino que toda esa superioridad la han logrado por sus propios méritos y esfuerzos, ningún sistema se la regaló. Ah, las escalas de la superioridad, queridos Harry, Macedonia, Princes, Diva, Reina, Chino, Cachetes, Scrapy, Frida y Relámpago, son un asunto de humanos que me tiene harta. Definitivamente los perros, somos de otro planeta.